Los Helicópteros Furtivos Que Sorprendieron A Bin Laden.

Una de las respuestas, según expertos, es que el equipo de operaciones especiales utilizó helicópteros furtivos desconocidos hasta ahora.

La evidencia proviene de las imágenes de los restos de uno de los helicópteros, que se estrelló al aterrizar en el recinto y fue destruido por los militares estadounidenses antes de regresar a su base.

Sin embargo, la cola de la aeronave ultrasecreta sobrevivió, proporcionándoles un gran número de pistas a los expertos en aviación.

Después de un trabajo de detectives, algunos especialistas han concluido que se trató de un UH-60 Blackhawk, modificado en gran medida para que fuera más silencioso y menos visible a los radares.

Según ellos, es la primera vez que helicópteros furtivos se han utilizado en una operación real.

Sin embargo, no serían los primeros de su tipo. La corporación estadounidense Sikorsky Aircraft fabricó un número de prototipos de helicópteros furtivos, conocidos como RAH-66 Comanche, para el ejército de Estados Unidos.

El programa fue cancelado en 2004, debido al aumento de los costos, antes de que el helicóptero entrara en funcionamiento.

"Lo nuevo aquí es su uso operativo", dice Bill Sweetman, editor de la revista Aviation Week. "No habíamos visto nunca helicópteros furtivos utilizados de esta manera".

"Lo que se busca es aumentar el elemento de sorpresa. Entre menos advertencia tenga el objetivo, mejor".

Sweetman añade que, en una situación como ésta, se puede necesitar una vía de escape para la aeronave, por lo que el tiempo es esencial.

Para lograr que un helicóptero sea furtivo es necesario deshacerse de ciertas formas y áreas que los radares detectan con facilidad, dice Tony Osborne, director adjunto de Rotary, una revista británica sobre helicópteros.

"Hay que cubrir partes clave para que las ondas del radar reboten en diferentes direcciones o se absorban", señala.

"La caja de engranajes del rotor de cola estaba cubierta. Nunca he visto esto antes en un helicóptero. Sabemos que están experimentando todo el tiempo, pero es impresionante verlo puesto en acción", añade.

La aleta de la cola es completamente lisa y parece recubierta de un material nacarado que se ve plateado bajo algunas luces y negro bajo otras, dice Osborne.

"Sólo he visto eso en aviones furtivos y es probable que absorban las ondas de radar. Hasta los remaches están cubiertos. Los radares son muy sensibles e incluso pequeños remaches podrían echar a perder la operación".

"Los restos de la cola indican que el tren de aterrizaje era retráctil, lo que también por lo general puede ser detectado por el radar. Por eso, su retracción puede haber ayudado a evitar la detección".

"Parece que el rotor de cola tiene cinco o seis paletas. Esto significa que el rotor podría tener una rotación más lenta y, por lo tanto, hacer menos ruido. El ruido es causado por las puntas de las paletas que giran a gran velocidad, golpeando el aire", explica.

Osborne señala que pasar sin ser detectado por un radar también es posible sin tecnología furtiva. La mayoría de los radares de Pakistán están en el suelo y, por lo tanto, en un ángulo que hace que las aeronaves que vuelan a baja altura sean difíciles de descubrir.

Un funcionario de inteligencia paquistaní, que desea permanecer en el anonimato, le dijo a un corresponsal de la BBC en Pakistán, Syed Shoaib Hasan, que los helicópteros no fueron detectados por el radar y que sólo se vieron cuando entraron al país desde Afganistán.

Según él, eran cuatro helicópteros, que volaban muy bajo, y cuando los paquistaníes los vieron se encendió la alarma.

Aviones paquistaníes estaban a punto de despegar cuando los militares de Estados Unidos le informaron al alto mando de Pakistán que iban a realizar una operación, dijo.

"Nos dieron unas coordenadas y dijeron que iban tras un objetivo 'de alto valor'. Hay ciertos protocolos cuando eso pasa. Nosotros cuidamos la seguridad exterior mientras que ellos van y hacen su trabajo. Pero no sabíamos en absoluto de quién se trataba", explicó.

El funcionario le dijo a la BBC que ellos creían que los estadounidenses iban a atacar un escondite en las montañas cerca de Abbottabad.

"No pensábamos que iba a ser en la ciudad misma", aseguró.

Se ha especulado que en la operación tomó parte otro helicóptero furtivo, idéntico al que se estrelló, y que ambos estaban apoyados por dos helicópteros Chinook más grandes.